roberto-fabelo_2406-755x490

Para Fabelo, 2015 es un año colmado de proyectos. Por lo que, según dice, tendrá que organizar mejor sus energías y sus tiempos: asistirá a diversas e importantes ferias de arte en Estados Unidos, estará presente en la Bienal de La Habana, se centrará en la ambientación de un barco alemán, que en estos momentos está en fase constructiva, y prepara una serie de esculturas a emplazarse en la isla de Mallorca, en Miami y en la capital cubana.

Y es que para Roberto Fabelo -pintor, dibujante, ilustrador y escultor- crear es su gran disfrute y una necesidad que lo acompaña desde pequeño, cuando en su Guáimaro natal moldeaba lagartijas, ranas o alacranes (con cera de los panales), o cuando dibujaba en el pizarrón de la escuela o sobre lozas pulidas con un lápiz de carpintero, o cuando -ya siendo estudiante del Instituto Superior de Arte- tallaba la tizas y las convertía en diminutas y mágicas esculturas… Desde siempre cualquier soporte le ha servido.

No obstante, en los últimos tiempos ha realizado esculturas en bronce, que es un soporte definitivo, pero asegura que eso no es lo más importante: el bronce no es un concepto, es un material y, simplemente, lo que hago es continuar desarrollando ideas y motivos pertenecientes a mi temario; ahora ha sido el bronce, pero si siento la necesidad de trabajar con acero inoxidable, aluminio o huesos –ya sea de humanos o animales–, lo haré, afirma concluyente.

Durante la conversación exclusiva de Fabelo con OnCuba, dimos por sentado que está apostando al gran formato, certeza que él no comparte: no necesariamente es así. Entre junio y septiembre de 2014, en el Museum of Latin American Art (MoLAA), Long Beach, ciudad de California, hice una gran exposición en la que exhibí piezas de mediano formato, y un conjunto -que era realmente el corazón de la exposición- de pequeños dibujos realizados sobre el “Tratado de anatomía humana”, de Leo Testut, una enciclopedia antigua de medicina que tiene esquemas anatómicos sobre los que trabajé, interviniendo las páginas y creando nuevas imágenes sobre esas hojas con sus textos y todo. No obstante, reconoce que en el gran formato se siente muy cómodo al tiempo que acepta que esa escala reclama muchas energías porque son piezas elaboradas, pero no me impongo límites.

Deudor de Goya y de Velázquez, Fabelo reconoce que dentro de su tejido referencial están también los cubanos Fidelio Ponce, René Portocarrero y Carlos Enríquez, entre muchos otros, porque sobre ellos ha puesto su mirada y, sin duda, hay influencias.

"Todo cubano es un reciclador nato", afirmó en una ocasión y ahora retoma el tema: es algo inherente a nuestra propia condición de supervivientes de las carencias y de las renuncias a muchas cosas; reciclar es un término que no se refiere, solamente, a lo material sino a los mejores sentimientos, a nuestras memorias, a nuestra cultura. Todos hemos tenido que reciclar y yo me he visto, también, en esa marea y -como reciclador y como cubano- he utilizado materiales que podían parecer finitos o en su estado de desaparición y los he trabajado, y esa mirada ha convertido un rincón lleno de telarañas en un sitio de poesía ignota. Uno no puede menospreciar nada del entorno, nada que salga de la mano del hombre, aunque haya cumplido su ciclo de vida física. En 1993 mi amigo el trovador Silvio Rodríguez, me dedicó una canción en la que en una de sus partes dice: “país en que los desechos son amados todavía”. Y es cierto, de esta Isla, amo hasta los desechos.

José Roberto Fabelo Pérez (Guáimaro, Camagüey, 1950). Graduado del Instituto Superior de Arte (1981) y de la Escuela Nacional de Arte (1972). Recibió, en 2004, el Premio Nacional de Artes Plásticas, máximo reconocimiento que otorga el Consejo Nacional de Artes Plásticas y la Distinción por la Cultura Nacional, que concede el Ministerio de Cultura. Es miembro de la Unión de Escritores y Artista de Cuba (UNEAC) y de la Asociación Internacional de Artistas Visuales.

Obras suyas se encuentran en importantes colecciones de España, Italia, Chile, Francia, Alemania, Panamá, México, Venezuela, Inglaterra, Estados Unidos y China, entre otros países, y han participado en diferentes ediciones de las prestigiosas subastas de Christie’s y Sotheby’s, en Nueva York. Considerado uno de los más destacados artistas del contexto contemporáneo cubano, a Fabelo, sin renunciar a compromisos internacionales, le interesa que su obra se exhiba en espacios públicos de La Habana, una ciudad a la que se siente ligado entrañablemente.

Tomado de: http://oncubamagazine.com/cultura/fabelo-de-esta-isla-amo-hasta-los-desechos/